No duerme desde 1973. Un hecho remarcable para este hombre en perfecto estado de salud. Trabaja día y noche en sus tierras donde ha vuelto a dar vida a un bosque desnudo. Thái Ngoc, de 64 años, es originario de la provincia de Quang Nam (Centro)
Este caso, a pesar de no ser el único en el mundo hace que tenga un especial interés debido a que resulta imposible creer que existan personas en este mundo que se resistan al fuerte poder del sueño. Mientras el resto de los mortales nos rendimos, muy a nuestro pesar, y cerramos nuestros queridos ojos, Thái Ngoc no duerme desde hace 35 años.
En varias ocasiones hay equipos que se han instalado en casa del Sr. Ngoc durante 3 ó 5 días para comprobar su insomnio, incluso filman todos sus movimientos a través de cámaras instaladas por todos los rincones de su casa, patio y granja. Su actividad laboral consiste en cortar el arroz, cultivar patatas, quemar madera, … y en el tiempo que deja los trabajos agrícolas, practica la cestería. En pocas palabras, trabaja de noche y de día.
Algunos expertos en medicina han invitado al Sr. Ngoc a ir al extranjero para ser tratado contra el insomnio a lo que el responde “yo iré si mi insomnio me provocara enfermedades que no puedan ser curadas en mi país. A pesar de mi insomnio siempre he gozado de buena salud, con una productividad de trabajo doblada. ¿Por qué habría de partir? Mirad esta granja de 8 hectáreas verde y frondosa…! Estaba desierta antes de que yo me ocupara de ella”
El Sr. Ngoc ha dividido su granja en varios sectores, cada uno reservado a una cultura diferente y adaptada a las condiciones del suelo. Numerosos son los árboles frutales y otros son especies del bosque para preservar las variedades de maderas en vías de desaparición. Cuando las noches son oscuras, enciende un fuego y una lámpara de aceite que ha fabricado el mismo.
Cerca de su granja y desde hace 30 años vive una pareja octogenaria. Cuando termina su trabajo, el Sr. Ngoc visita a estas personas ancianas, les ayuda no solamente en su vida cotidiana sino también en sus trabajos. Vigila el arroz y las plantas para que no sean comidas por los jabalíes.
¿Durará este insomnio toda la vida?, nadie sabe. Pero una cosa si es cierta, ha dado la vida a ese bosque asolado por la guerra….